Bárbara Rivera

Algunas adolescentes deben cambiar su estilo de vida para mejorar sus probabilidades de tener un bebé sano. Una dieta poco sana, el hábito de fumar y el consumo de alcohol y drogas pueden aumentar el riesgo de que el bebé nazca con problemas de salud como, por ejemplo, bajo peso al nacer.

Las adolescentes tienen más probabilidades de fumar durante el embarazo que las mujeres mayores de 25 años. Los bebés de las mujeres que fuman durante el embarazo tienen un mayor riesgo de nacer prematuros y con bajo peso y de padecer el síndrome de muerte súbita del bebé (SIDS). Estas mujeres también tienen un mayor riesgo de tener complicaciones durante el embarazo, incluidos problemas en la placenta.

Las madres adolescentes corren mayor riesgo que las mujeres de más de 20 años de tener complicaciones durante el embarazo, como parto prematuro, anemia y alta presión arterial.
Estos riesgos son incluso mayores cuando tienen menos de 15 años.

Sobre un total de 19 millones de casos nuevos de infecciones de transmisión sexual informados cada año, más de nueve millones afectan a jóvenes de 15 a 24 años.7 Estas enfermedades incluyen, entre otras:

  • Clamidia, que puede causar esterilidad en la persona afectada e infecciones en los ojos y neumonía en el bebé recién nacido.
  • Sífilis, que puede causar ceguera, la muerte de la madre y la muerte del bebé.
  • VIH, el virus que causa el SIDA. El tratamiento durante el embarazo reduce considerablemente el riesgo de que la madre infectada transmita la infección al bebé.
Bárbara Rivera





  • En el año 2006, más del 10% de todos los nacimientos en EE.UU. correspondió a madres de menos de 20 años de edad. La mayoría de los nacimientos entre madres adolescentes corresponde a niñas de entre 18 y 19 años de edad.
  • Alrededor de 750,000 adolescentes quedan embarazadas cada año y aproximadamente 442,000 dan a luz.
  • Alrededor de tres de cada 10 adolescentes quedan embarazadas al menos una vez antes de los 20 años de edad.
  • Aproximadamente una de cada cuatro madres adolescentes menores de 18 años tiene un segundo bebé dentro de los dos años del nacimiento del primero.
  • Las madres adolescentes tienen más probabilidades que las madres mayores de 20 años de tener un bebé prematuro, corriendo un mayor riesgo de sufrir problemas de salud, incapacidades permanentes e incluso la muerte.

Fuente: http://www.nacersano.org/centro/9388_9919.asp
Carmen Sánchez

Se define como: "el que ocurre dentro de los dos años de edad ginecológica, entendiéndose por tal al tiempo transcurrido desde la menarca y/o cuando la adolescente es aún dependiente de su núcleo familiar".

La fecundidad adolescente es más alta en países en desarrollo y entre clases sociales menos favorecidas, haciendo pensar que se trata de un fenómeno transitorio porque, de mejorarse las condiciones, ella podría descender.

El embarazo en las adolescentes se ha convertido en seria preocupación para varios sectores sociales desde hacen ya unos 30 años. Para la salud, por la mayor incidencia de resultados desfavorables o por las implicancias del aborto. En lo psicosocial, por las consecuencias adversas que el hecho tiene sobre la adolescente y sus familiares.

Cuando la adolescente se embaraza inicia un complejo proceso de toma de decisiones y, hasta decidirse por uno, aparece siempre el aborto a veces como un supuesto más teórico que real. Salvo que el tener un hijo forme parte de un proyecto de vida de una pareja de adolescentes, el embarazo en ellos es considerado como una situación problemática por los sectores involucrados pero, si se considera al embarazo en la adolescente como un "problema", ello limita su análisis. En todo caso, esta "problematización" se aplicaría a algunas subculturas o a algunos estratos sociales, pero no a todos los embarazos en adolescentes. Además, el considerarlo un "proble-ma", exige aplicar terapéuticas que aporten soluciones sin permitir implementar acciones preventivas adecuadas.Por todo ello, el embarazo en adolescentes necesita un abordaje integral biopsicosocial por un equipo interdisciplinario capacitado en la atención de adolescentes y en este aspecto específico de la maternidad – paternidad.